martes, 27 de diciembre de 2016

ROSTROS DE ANGOLA (2) - 100 espejos del alma


Hace unos días publiqué el Nº 1 de Rostros de Angola, anunciando una nueva serie, pues son muchas las fotos que tengo recogidas de ese país, no de mi propiedad, ya que no he podido cumplir mi sueño de visitar Angola, sino de tantos amigos y amigas, que vivieron, trabajaron y recorrieron ese gran país. Y no puedo tener escondidas estas fotos, pues a mí mismo me subyugan, y deseos compartirlas,

Se trata de entrar en un pueblo por los rostros y los ojos de su gente.

Estoy seguro que si observas con interés estas cien miradas y expresiones de este conjunto de angoleños, hombres y mujeres, y, sobre todo, niños y niñas, podrás llegar a decir muchas cosas de este pueblo.

Te quedan deseos de quedarte prendido de esas miradas y expresiones y de entender por qué miran así, desde tan chiquitos.

Este vídeo continúa la serie de rostros que ya hemos presentado de: Ecuador, Brasil, Rwanda, Congo.


Y después de ver y volver a ver las fotos de esta gente, más deseos me entran de seguir estudiando la sociología de los países por los rostros y primeros planos de su gente.

lunes, 26 de diciembre de 2016

NAVIDAD - KUARTANGO - LA GRANDEZA DE NUESTROS PEQUEÑOS


El día 29 de diciembre tendremos un encuentro de los abuelos y los niños para intercambiar experiencias de la Navidad. Queremos hacer como un juego que llegue a lo profundo del corazón:
*      
       Cómo era la Navidad hace 80 años, cuando los abuelos de ahora eran niños.
*      Cómo será la Navidad dentro de 80 años, cuando los niños de ahora sean abuelitos.
Y de todo ello, nos quedaremos con lo esencial y lo celebraremos.

Ahora, para animarte a participar en este encuentro, te mostramos el encuentro que tuvimos en Kuartango los niños y la comunidad hace justamente dos años, el día 28 de diciembre de 2014.
¿Qué fue aquel encuentro? Es difícil buscar una palabra para decir lo que fue.
Fue un poco todo…

Los niños de la catequesis habían dicho que querían presentarse un día ante la comunidad, para darse a conocer y contar lo que están haciendo.
Y prepararon un cuento navideño para contarnos a todos.

Los padres se involucraron.
El coro se unió a la fiesta, haciendo más que un concierto, una representación cantada de la celebración e integrando a los niños a la música.
Hubo danza.

Celebramos la Navidad.
Contamos la vida de Jesús.
Y continuando el encuentro con este Jesús humano y sencillo, hicimos la misa.

Fue eso… y más cosas.

Nos quedamos con la espontaneidad de los niños, ellos son sinceros y dicen lo que sienten.

sábado, 10 de diciembre de 2016

BRASIL - DESCUBRIENDO LA VIDA EN LA FAVELA


Aunque han pasado unos años de aquella experiencia, ahora quiero mostrar, a través de este vídeo de 46 fotos y 5 minutos, mi sencilla pero profunda experiencia en una favela de Belo Horizonte, de la mano de unas amigas ecuatorianas que trabajaban allá, y me dieron la más grande lección de la entrega y la esperanza que debemos tener si queremos cambiar la realidad de los más pobres.

Cuando entré en la favela, la sensación fue tan fuerte que, a pesar de haber conocido las situaciones de pobreza más extremas como los campos de refugiados de África, los indígenas amazónicos arrancados de su hábitat y distintos suburbios en ciudades latinoamericanas, que lo primero que me vino a la mente, se lo dije a Tania, mi acompañante por la favela: “Esto es el infierno”.

La reacción de Tania, persona dulce y entregada con amor a los más pobres, fue firme y rebelde: “Aquí he conocido -me dijo- las experiencias de vida y amor más hermosas”.
Después, recorriendo con ellas la favela, sentí que era verdad.
Tania me contó su experiencia cuando vivió durante una semana con una de las mujeres, que se dedicaba a “reciclar”, es decir a rebuscar en la basura. Me mostró la fe, la fuerza, de esta mujer.

Y además, me di cuenta que mi expresión, de alguna forma, desvalorizaba la lucha absoluta que lleva este grupo de mujeres por conquistar derechos y beneficios para los moradores de la favela. Ellas no sólo tienen derecho a la esperanza, sino que son las que realmente más hacen para que cambien las cosas de este mundo más injusto.


Hace falta ojos profundos para descubrir la vida donde algunos no vemos más que muerte. Hace falta una opción muy clara para estar en los lugares exactos donde se deciden cosas vitales. Hace falta coraje, rebeldía, para desarmar todo aquello que se opone a la esperanza.

lunes, 5 de diciembre de 2016

“APRENDER A LLORAR” - Una historia de niños en el Campo de Refugiados


  
¿No se te han saltado nunca las lágrimas al ver situaciones trágicas en la vida?
Una vez, en el campo de refugiados de Goma, en R. D. de Congo, tuvimos esa experiencia.
Ver a los niños sufrir, sin perspectivas de futuro ni de nada, como consecuencia de ese maldito mineral que es el coltán, la base de los ordenadores y móviles, con los que el mundo se entretiene inconscientemente, mientras estos niños víctimas de las profundas injusticias malviven en aquel campo de refugiados, es algo que te rebela, que te hace derramar lágrimas de impotencia, de indignación. Y cuando estos niños te abrazan y te sonríen, vuelves a llorar de emoción y de gratitud.

¡Este mundo es una porquería, mientras tenga estos niños tirados allá y nos dediquemos aquí a vivir instalados en nuestro castillo del bienestar!

Y cuando el papa Francisco dijo en Filipinas que al mundo de hoy “le falta aprender a llorar”, nos acordamos de esta historia nuestra de los niños del campo de refugiados. En Filipinas, una niña de doce años llamada Glyzelle Palomar, le dijo a Francisco: “Hay muchos niños abandonados por sus propios padres, muchos niños que son víctimas de muchas cosas terribles como las drogas o las prostitución. ¿Por qué Dios permite estas cosas, aunque no es culpa de los niños? y ¿Por qué tan poca gente nos viene a ayudar?".
Y Francisco dejó de lado su discurso preparado y explicó la importancia de aprender a llorar y dijo que “sólo ciertas realidades de la vida se ven con los ojos limpiados por las lágrimas”.

Así que les hemos contado esta historia a nuestros niños de Kuartango, para que conozcan la realidad.


¡Aquí va la historia, en este Vídeo de 4 minutos y 42 fotos, con música!

jueves, 1 de diciembre de 2016

RAICES MONTUBIAS

RAICES MONTUBIAS



Este reportaje “RAÍCES MONTUBIAS” contiene 60 fotografías de “aquellos tiempos” de vivencias profundas en tierras de Manabí y Los Ríos, en Ecuador.

Aún no existía la cámara digital. Muchas fotos no son mías, sino que reposan en mis archivos, provenientes de distintos autores y lugares. Y deseo sacarlas a luz y compartirlas con los amigos y amigas del extenso mundo apasionado de la cultura.

Esta presentación desea mostrar que el pueblo montubio, en la Costa Ecuatoriana, es un pueblo vivo. Y esto lo vas a percibir a través de las miradas francas de los niños, a través de la laboriosidad de sus hombres y mujeres y a través del ambiente desenfadado y espontáneo de sus gentes.
Hacen falta ojos especiales para captar la esencia de un pueblo. Estas fotos quieren contribuir a ello.
Creo que vale la pena dedicarse más ardientemente a descubrir los valores de la cultura montubia, la forma de ser y pensar del hombre y la mujer montubios. Una tarea pendiente.

¡Mira, observa y, sobre todo, disfruta!

La canción “Raíces y sueños”, compuestas por Nerio David (música) y Juan Ramón Etxebarria (letra), da vida y sentido al recorrido.

Y SUEÑOS
                I
Un hombre y una mujer
en medio de la sabana
se miraron a los ojos
y levantaron su casa
               II
Los ojos eran de fuego
y sus pechos manantiales
sus manos eran de flores
juguetes eran sus sangres
(Estribillo)
La vida crece y crece
entre el río y los samanes
año a año llegan los hijos
y con ellos los compadres
a la noche se reúnen
a contar viejos cuentos
amorfinos y adivinanzas
lanzando la risa al viento
               III
Erguido jinete va
el montubio en los caminos
le abre trochas a la vida
desafiando los peligros
                 IV
La montubia es hacendosa
fuerte como caña brava
de tarde con las vecinas
descansa de la jornada
              (Coda)
La abuela cuidando nietos
es gallina con polluelos
siempre juntos deben ir
las raíces y los sueños